26 junio 2008

Un Faro de América Latina

Hoy, 26 de junio, se cumplen 100 años del nacimiento de Salvador Allende. Un nombre cuya huella no sólo dejó su impronta en la historia de Chile, sino también en el imaginario político del mundo contemporáneo. Los 100 años de Allende no fueron de soledad, sino de compromiso creciente con los pobres y postergados, con los soñadores de sociedades más justas y con los impulsores de un orden internacional sin dominadores y dominados.
Allende siempre actuó en el marco de las instituciones constitucionales. Sostenía que la libertad es el espacio ideal para construir una mayor igualdad.
Por eso, esta conmemoración también nos convoca a una pregunta esencial: ¿por qué los Mil días de Allende como presidente de Chile han capturado la imaginación de tantos en todo el planeta? Esa experiencia suscitó emociones mayores, también discusiones profundas, al igual que sueños derrumbados cuando bullían los entusiasmos. Algo especial hubo allí, capaz de provocar una tremenda ola de solidaridad que movilizó a los mejores hombres y mujeres de todos los continentes.
Como Allende lo dijo: "Pisamos un camino nuevo; marchamos sin guía por un terreno desconocido; apenas teniendo como brújula nuestra fidelidad al humanismo de todas las épocas".
Esos Mil días tuvieron lugar en un Chile republicano. Un país respetado en el mundo por la forma como, a poco andar de su independencia, estuvo en condiciones de cimentar una república en bases sólidas.
Allende actuó siempre en el marco de las instituciones constitucionales y las defendió en su mérito y en su condición de instrumentos reguladores de su propia transformación. Esa convicción determinó su conducta política desde sus primeras responsabilidades parlamentarias hasta su decisión de acabar con su vida cuando esas instituciones eran barridas por la fuerza.
Allende emerge de un país donde amplios sectores aspiran a mayor igualdad y justicia. En el Chile de comienzos del siglo XX donde la izquierda se fue haciendo cada vez más fuerte. Liberales y radicales del siglo XIX en su brega por mayores libertades y tolerancia abrieron el camino para las demandas sociales por largo tiempo sofocadas; así, cinco años antes de la revolución soviética, en junio de 1912, se funda el Partido Obrero Socialista, nombre inicial del Partido Comunista, el cual una década después logra tener dos diputados en el Parlamento. A comienzo de los años treinta emerge un fuerte Partido Socialista, en cuya fundación participó Allende.
Esa izquierda fuerte y en ascenso avanzó en tiempos de guerra fría y por ello el conflicto ideológico mundial también tuvo, como en otros países, su proyección al interior de Chile. Cuando llegan los magníficos sesenta, Chile vive un fuerte desarrollo político en torno a sectores de avanzada.
El sueño socialista y democrático de Salvador Allende ha prendido en los nuevos líderes de América Latina, a pesar de haber sido sangrientamente interrumpido por un ejército antinacional, pelele del capitalimo imperialista estadounidense.
La epopeya de Allende confirmó lo que anticipaba el Che: que en una revolución verdadera, como la que se desencadenó en Chile, se triunfa o se muere. Es la lección de Chile. El pueblo de Allende, sin duda, volverá a luchar por una sociedad más justa sin olvidar esa enseñanza.
Heroicamente, se calzó un casco para medirse de igual a igual con generales traidores y rastreros, que el 11 de septiembre (de 1973) mandaron tropas, blindados, artillería y aviones a atacar por tierra y aire al indefenso palacio de gobierno.
El heroísmo de Allende, que no alcanza a superar ninguno de los militares que aparecen en la historia épica de Chile, tampoco lo esperaban muchos políticos que combatieron a su gobierno y otros que lo apoyaron, afirma hoy en un editorial M. Cabieses, de la revista chilena Punto Final.
Los que midieron a Allende por las apariencias, se equivocaron. No percibieron la madera de inmortalidad con que estaba tallado ese hombre.
Han pasado los años, las sombras del olvido empiezan a cubrir el terrorismo de Estado de militares y empresarios vende-patria, la lucha clandestina, la resistencia y sus miles de héroes y mártires.
Se desgranan, uno a uno, los pusilánimes y monótonos años de corrupción y oportunismo de la Concertación. Sin embargo, la admiración y respeto por el gran presidente que fue Salvador Allende han crecido. Su valor y consecuencia de estadista y revolucionario alientan a retomar la lucha por el socialismo. fuente

25 junio 2008

Represion a los estudiantes, amedrentamientos..

Hoy Miércoles 25 de Junio a las 10, de la mañana, fué RAPTADA nuestra VOCERA, Alejandra Saavedra, estudiante del Liceo Confederaciòn Suiza.
Estando con los demás estudiantes, en el metro Estación Baquedano, les dijo que tenía que hacer una llamada telefónica para coordinar la movilización, atravesó al teléfono público donde fué interceptada por el GOPE, le dijeron que era control de identidad, ella mostró su cédula, a lo cual ellos respondieron que era en Comisería. La subieron al vehículo Policial en donde habían más estudiantes, todas ellas mujeres, la orden del Gope fué la siguiente: SIENTATE SIN LEVANTAR LA CABEZA, NADA DE CELULARES, Y ESTA PROHIBIDO HABLAR, dos estudiantes hablaron e inmediatamente les pegaron.
Después de un largo trayecto en el referido vehículo fueron dejando de a una a las estudiantes en distintas comunas de Santiago, a nuestra Vocera la dejaron en la comuna de San Miguel a las 12,30 horas.
Esta es la nueva careta que nos están mostrando las Fuerzas especiales de características violentas de agresión y amedrentamiento hacia nuestros estudiantes.
Sabemos que esto sirve, para desviarnos del tema del derecho a la Educación Pública, pero SEGUIREMOS CON MAS FUERZAS JUNTO A NUESTROS HIJOS, que han tenido, desde siempre, el valor de afrontar a un estado represivo; NO NOS AMEDRENTARAN, NI BAJAREMOS LA CABEZA ANTE LA
VIOLENCIA EJERCIDA POR EL GOPE.
POR CADA GOLPE QUE LES DEN A NUESTROS HIJOS SE SUMARA UN APODERADO MAS.

Asamblea de Padres y Apoderados de Alumnos en Toma
LICEO CONFEDERACION
EN DEFENSA DE LA EDUCACION

24 junio 2008

Que pasa con el futuro presdente de los eua?

¿Entonces, Obama?

El periódico israelí Haaretz se refirió a la cuestión: el Instituto de Washington para políticas en el Lejano Oriente (Winep, por sus siglas en inglés) había publicado la versión final del informe preparado por su grupo de trabajo sobre el futuro de las relaciones EE.UU.-Israel. Señala: “El título es llamativo: ‘Cómo profundizar la cooperación EE.UU.-Israel frente al desafío nuclear iraní’. Pero no menos llamativa es la lista de las personas que avalaron el informe: Tony Lake y Susan Rice, de la campaña de Obama, Vin Weber, James Woolsey del campo de McCain” (www.haaretz.com, 15-6-08). Los dos candidatos a la presidencia, el pacifista (¿o no?) demócrata y el neohalcón republicano, juntos en la fundamentación de una guerra contra Irán.

El Winep es un think-tank financiado por el Comité estadounidense-israelí de asuntos políticos (Aipac, por sus siglas en inglés), el lobby más poderoso de Washington, pro Tel Aviv, desde luego. “Hay una manera –propone Haaretz– de ponerlo en forma de titular periodístico: los asesores de Obama y de McCain están de acuerdo: EE.UU. e Israel deben considerar una acción militar preventiva contra Irán”. Que, para que no ocurra, debe abandonar su presunto programa de fabricación de armas nucleares. Esto es curioso: al finalizar el año pasado, los 16 servicios estadounidenses emitieron por consenso su Estimación Nacional de Inteligencia (NIE, por sus siglas en inglés) en la que asientan que Teherán canceló en el 2003 la pretensión de fabricar bombas nucleares y que es improbable que produzca el uranio enriquecido necesario para ello antes del 2010 o el 2015 (www.odni.gov, 3-12-07). Pareciera que esa conclusión disgustó a Obama y McCain.

El informe del Winep subraya que la NIE “tuvo la no buscada consecuencia de mitigar el sentido de urgencia de la presión (sobre Irán)”. Se preocupa por Israel, al que insatisfacen la distensión y contención a la manera de la Guerra Fría, hecho que lo puede empujar a una acción independiente. Tel Aviv, por lo demás, no oculta sus intenciones. El viceprimer ministro israelí Shaul Mofaz declaró públicamente que las sanciones de la ONU a Teherán son ineficaces y que “no hay otra alternativa” que la guerra. El primer ministro Olmert se reunió con W. Bush para concertar una acción conjunta, según anticipó el periódico israelí conservador Yediot Aharonot. Y el futuro mandatario de EE.UU. –sea demócrata, sea republicano– ya está de acuerdo.

Durante las internas demócratas, Obama habló de negociar con Irán, pero el informe del grupo de trabajo que firmaron sus dos asesores principales pide que se inicie “un diálogo nacional” para convencer al pueblo norteamericano de que Irán es un peligro nuclear. También recomienda que cada uno de los dos candidatos nombre un par de consejeros con capacidad de decisión para integrar un foro que analizaría la aplicación de “opciones coercitivas (como un embargo a las exportaciones de petróleo de Irán o a sus importaciones de productos petroquímicos”, así como “una acción militar preventiva”. Claro que el informe no menciona que Israel posee 150 bombas atómicas, según declaró el ex presidente Jimmy Carter (www.timesonline.co.uk, 26-5-08). Para qué recordarlo.

Obama se opuso a la guerra contra Irak desde el primer momento y habló de la necesidad de un cambio en EE.UU. que abarcara a la política exterior. Pero lo primero que hizo al día siguiente de ganar las internas fue presentarse ante una asamblea del Aipac, amenazar a Irán, proclamar “Jerusalén indivisa, capital de Israel para toda la eternidad” –una muletilla que hasta los neoconservadores han retirado de circulación–, pedir 30 mil millones de dólares adicionales de ayuda militar a Tel Aviv y culpar solapadamente a los palestinos del congelamiento del proceso de paz callando que hace 40 años que las tropas israelíes ocupan los territorios destinados por la ONU a la creación de un Estado palestino. Los silencios de Obama son más elocuentes que él.

El Partido Demócrata basó su prédica en la retirada de los efectivos de Irak durante las elecciones intermedias del 2007 y así logró un tenue control en la Cámara de Representantes y el Senado. Nunca pudo imponer cláusulas vinculadas con el regreso a casa de las tropas a la asignación de sumas enormes para la ocupación de Irak y Afganistán. El Pentágono presiona: ahora exige que antes del 4 de julio que viene el Congreso apruebe una nueva partida de 165.000 millones de dólares para financiar las dos guerras. Los demócratas están dispuestos a votarla sin condiciones ya. Se habrán cansado.

FUENTE